La Asociación Española de Profesionales del Turismo (AEPT) organizó la pasada semana su II Foro sobre Turismo Cultural, que contó con un tema principal sobre la mesa: ¿es función de la Administración Pública explotar los recursos culturales y crear productos alrededor de ellos o esta tarea corresponde al empresariado privado?
Los recientes hallazgos de los restos óseos de Miguel de Cervantes en una iglesia de Madrid dan más importancia aún a la búsqueda de una resolución para esta pregunta que se hace todo el sector turístico español, recursos culturales, vs productos turísticos.
Bajo el título ¿Lo estamos haciendo bien? el II Foro sobre Turismo Cultural de la AEPT derivó en la fijación de dos bandos bien definidos: por un lado, los representantes de la Administración Pública, y por otro lado los empresarios privados, que dirimieron las circunstancias por las que, según el caso, debe ser uno u otro el que comience a explotar un recurso cultural y crear a su alrededor productos turísticos concretos.
Dentro del tema principal de las competencias a la hora de explotar un recurso cultural intrínseco del país —un edificio histórico, un enclave natural o un hallazgo de gran interés sociocultural— los representantes de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento argumentaron que “la administración está principalmente para apoyar a la iniciativa privada con medidas como mejorar la señalética, establecer un protocolo de conservación de los recursos o implementar la información de los mismos a través de las Oficinas de Turismo, pero nunca para comenzar la explotación del mismo”, según puntualizaba el director de Marketing y Partenariado de Madrid Destino, Miguel Sanz.
Patrimonio y eventos privados
Una postura que no sentó nada bien a los empresarios y profesionales asistentes en la sala, ya que ellos creen que lo mejor es esperar a que sea el ente público el que implante el marco adecuado para comenzar a explotar un recurso perteneciente al estado ya que “hay edificios Patrimonio Nacional que aún no podemos utilizar para eventos privados mientras que para presentaciones de ámbito público sí lo están. No entendemos esta dicotomía excluyente”, comentó Luis Díaz, director ejecutivo de la Asociación Española de DMC.
En este debate entre sector público y privado, Miguel Sanz añadía que hasta ahora los edificios culturales como los museos “no estaban preparados para ser explotados turísticamente, sino que su objetivo era la conservación del patrimonio. Eso hoy en día se está intentando corregir gradualmente”, al tiempo que el director de Turismo de la Comunidad de Madrid, Joaquín Castillo explicaba que la Comunidad de Madrid ha creado la Asociación de Turismo de Madrid, un ente conformado por el gobierno autonómico y local junto con las 60 empresas más influyentes dentro del sector turístico español para, precisamente “crear políticas de actuación conjuntas que tengan en cuenta las necesidades del empresariado bajo las premisas presupuestarias y legales con las que debe trabajar la Administración Pública”.
Los Food Trucks, a debate
Varias de estas acciones que se están llevando a cabo tienen como escenario principal el eje más turístico de España, conformado por las calles que van desde la Fuente de Cibeles hasta la Plaza de España de Madrid junto con Callao y Puerta del Sol. En este sentido, el chef ejecutivo de Hamburguesa Nostra, Juan Pozuelo argumentó que la cultura “también es gastronomía, pues es una de las señas de identidad de cada pueblo” y pidió una postura “más canalla y menos señorial” así como “crear un producto gastroturístico más allá de los restaurantes típicamente para turistas de estas zonas” a la hora de crear iniciativas locales en este segmento, poniendo sobre la mesa los llamados Food Trucks o puestos ambulantes como medida ideal de liberación y dinamización de la oferta gastronómica.
En este sentido, Sanz fue claro al explicar que esa política de actuación “se está contemplando” pero a la vez, aprovechó la ocasión para poner de manifiesto que “hay otros muchos empresarios que no quieren que se legalicen los Food Trucks porque lo consideran una competencia desleal, al no tener que pagar estos por un local, personal, elementos de seguridad alimentaria y de los clientes…”
Los restos de Cervantes
Otra de las acciones que se pusieron sobre la mesa, de plena actualidad, es qué hacer con los restos óseos de Miguel de Cervantes hallados en la iglesia de las Trinitarias de Madrid. Castillo recordó que la potestad para explotar este hallazgo “no pertenece al Ayuntamiento ni a la Comunidad, ya que el recinto es de las madres trinitarias, por lo que la Administración solo puede esperar acontecimientos”.
Una postura que chocó con la de los empresarios presentes, que pidieron unas políticas de promoción mucho más agresivas, citando las que se han hecho en otros países como Francia, que sin grandes desembolsos económicos ha hecho que miles de personas vayan cada año a visitar la tumba de Antonio Machado en la localidad de Collioure.
