Aunque el origen de los polvorones se remonta al siglo XVI según está documentado en el convento de Santa Clara de Estepa, la primera comercializadora de este dulce tal y como lo conocemos hoy es Micaela Ruiz Téllez, ‘La Colchona’, que vivió en la localidad sevillana entre 1824 y 1901.
Un producto que lleva más de 150 años elaborándose en el municipio sevillano de Estepa, donde se ubican las industrias dedicadas a su elaboración y envasado. Y, para este año, la campaña del mantecado arranca con la previsión de superar las 20.000 toneladas en dulces navideños, esperando un crecimiento en ventas y producción superior a los de 2015, un dato vinculado al aumento en el consumo.
La campaña de 2016 será la primera con la inscripción de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Polvorones de Estepa en el Registro de Denominaciones de Origen Protegidas y de Indicaciones Geográficas Protegidas de la Unión Europea, algo que supone un nuevo hito y un reconocimiento histórico para el sector, así como un marchamo distintivo de calidad para su promoción exterior. Una nueva campaña que prevé seguir defendiendo los 2.000 empleos directos —el 85% mujeres— y otros 2.500 indirectos de la empresa auxiliar.
Inicio de la campaña
Tradicionalmente, el mes de septiembre marca el inicio de la campaña de fabricación de mantecados, polvorones y otros dulces navideños en Estepa. Aunque este año, de forma excepcional, algunas fábricas adelantaron parte de su producción a agosto, es ahora, coincidiendo con la Feria de Estepa, cuando echa a andar el motor económico de la localidad y su comarca, con la elaboración de 20.000 toneladas de toda la variedad de los productos típicos navideños que se fabrican en las diecinueve industrias amparadas por el Consejo Regulador.
En torno al 15% de la producción estepeña se destina a la exportación en países donde hay colonias españolas como Alemania, Francia, Estados Unidos, Argentina, Brasil o Suiza. Un nuevo ejercicio que arranca con el reto de sus empresas de innovar, crecer, diversificar y ganar mercados, aumentar la productividad y estimular el consumo.
Reconocidos por la UE
Desde el pasado mes de marzo, Estepa cuenta con la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Polvorones de Estepa en el Registro de Denominaciones de Origen Protegidas y de Indicaciones Geográficas Protegidas de la UE, un reconocimiento que se suma a la ya existente de los mantecados, que data de noviembre de 2011 y que garantiza el cumplimiento de unos requisitos superiores a los exigidos para el resto de productos de la misma clase o variedad.
Entre las características que definen a los productos amparados por la IGP se encuentran sus ingredientes fundamentales: harina de trigo, manteca de cerdo, azúcar glas, almendra, canela y aromas naturales, pudiendo añadirse clavo como elemento alternativo. Estas materias primas son comunes a los dos tipos de polvorones que protege esta figura de calidad: ‘caseros’ y ‘almendra’ (o ‘tradicional’) en función de la cantidad de almendra que incluye la receta empleada para su elaboración (un mínimo del 8 % en el ‘tradicional’ y del 15 % en el ‘casero’).
En este recorrido de más de tres años desde su solicitud por el Consejo —los polvorones ya gozaban de la denominada Protección Nacional Transitoria (PNT)—, el polvorón ha tenido que presentar sus credenciales para poder entrar en la lista de los productos que contarán con el respaldo y la defensa por parte de los organismos competentes de la Unión Europea. Algunas de las empresas amparadas por el Consejo Regulador cuentan, además, con las certificaciones Halal, lo que está permitiendo abrir mercado en países de sociedad mayoritariamente musulmana.
![Los polvorones de Estepa preparan su primera navidad como IGP](http://diariodegastronomia.com/wp-content/uploads/2016/09/Polvorones-de-Estepa.jpg)