Una buena parte de los alimentos que se producen en la Tierra no sirven para nada, ya que, desgraciadamente, acaban en el cubo de la basura. Pero en los últimos años han aparecido una serie de movimientos e iniciativas que luchan contra el desperdicio, con soluciones como la venta de alimentos con fecha de caducidad próxima a precios reducidos.
Como, por ejemplo, Phenix, una empresa certificada como B Corporation, un nuevo tipo de negocios que buscan el equilibrio entre sus objetivos y los beneficios, con la obligación legal de considerar el impacto de sus decisiones en sus empleados, clientes, proveedores, la comunidad y el medio ambiente.
“En el caso concreto de España se tiran 7,7 millones de toneladas de alimentos cada año y una persona desperdicia una media de 179 kg por año. Pero el problema no se queda aquí. El denominado ‘Índice de desperdicios de alimentos 2021’ expone una cifra casi aterradora: antes de la pandemia hubo 931 millones de toneladas de alimentos desperdiciados, lo que sugiere que el 17 % de la producción total de alimentos en el mundo se desperdició, según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la organización británica sobre residuos WRAP”, explican desde Phenix.
Y según este estudio liderado por la ONU, la mayor parte del desperdicio de alimentos —equivalente a un 61 %— proviene de los hogares. Por este motivo, desde Phenix han preparado una selección de recetas que ponen la cocina al alcance de todos y con las que aprovechar los alimentos para que no tengan que ser malgastados. Como, por ejemplo, estas.
Croquetas de quesos variados sobrantes
INGREDIENTES
Para 4 personas
- Quesos sobrantes que tengamos por la nevera (en este caso: 10-15 g queso parmesano, 60 g de queso azul, 10 g de queso emmenthal)
- 1 vaso y medio de leche entera
- 50 g de harina de trigo integral
- 30 g de mantequilla
- Una pizca de sal
- Especies: nuez moscada, pimienta negra y cebolla en polvo
ELABORACIÓN
En una olla o sartén alta al fuego fundimos la mantequilla, añadimos la harina y removemos hasta que se transforme en una masa homogénea.
Cortamos el queso azul en trocitos y lo añadimos a la olla sin dejar de removerlo hasta que se disuelva totalmente. Vertemos la leche poco a poco, agregamos el resto de los quesos sin dejar de remover y añadimos más leche si es necesario. Añadimos sal y las especies a la masa y seguimos haciendo al fuego sin dejar de remover durante unos 10-15 minutos.
Dejamos enfriar la masa y luego, utilizando una cucharada sopera y las manos vamos dando forma a las croquetas.
Las rebozamos en el pan rallado y las freímos en abundante aceite caliente hasta que se doren, dejándolas una vez fritas sobre papel absorbente para evitar el aceite sobrante.
