Un debate, sin límites ni ideas preconcebidas, sobre las ventajas e inconvenientes de establecer nuevas categorizaciones para los vinos de Rioja, un tema complejo sobre el que sus propios protagonistas, los bodegueros del sector vitivinícola riojano, confirman la necesidad de avanzar con medidas concretas que mejoren y complementen el actual sistema.
La VII Jornada DIAM, celebrada el pasado lunes, estuvo protagonizada por un debate sin tabús sobre las ventajas e inconvenientes para los vinos de Rioja de establecer nuevas categorizaciones, un tema complejo sobre el que sus propios protagonistas, los bodegueros del sector vitivinícola riojano, han concluido la necesidad de avanzar con medidas concretas que mejoren y complementen el actual sistema.
El de las categorizaciones es un tema de gran repercusión para la D.O.Ca. Rioja, ya que está en juego nada menos que la revisión de un modelo de clasificación implantado hace cuarenta años, cuyos resultados todos consideran excelentes para el conjunto de la Denominación al haber proporcionado valor, prestigio y diferenciación a sus vinos. Y es precisamente el éxito de este modelo, y lo que supone para la economía de la región, lo que exige sopesar con prudencia los inevitables cambios que se avecinan, como pusieron de manifiesto los diez ponentes de la Jornada organizada por DIAM, que por primera vez planteaba de forma pública y abierta la discusión sobre un tema que parecía tabú.
¿Mantener o revolucionar?
En este sentido, la jornada propuso un debate entre los partidarios de revolucionar las categorizaciones de los vinos de Rioja frente a quienes abogan por mantener el actual sistema de clasificación, o quienes plantean actualizarlo con la incorporación de nuevas figuras.
El debate existente entre las ventajas e inconvenientes para los vinos de Rioja, oportunidades o debilidades, arma de venta o confusión para el consumidor, resulta sin duda un tema de gran actualidad para las bodegas de la D.O.Ca. Rioja. El tema es complejo, así que el debate fue completamente abierto para que pudieran tener cabida todas las posturas y planteamientos realizados por sus propios protagonistas, los bodegueros del sector vitivinícola riojano.
Entre las ponencias ofrecidas, se plantearon temas como: ‘El consumidor confuso’, ‘El modelo de categorización de los vinos de Rioja en comparación con modelos de negocio vitivinícola en otros países. Presente y futuro’, ‘Las categorizaciones actuales de los vinos de Rioja y la conveniencia o no de establecer un nuevo sistema de clasificación’, o ‘¿Cuál sería el mejor modelo de categorización para Rioja: clasificación de vinos, de terrenos, de bodegas…? Ventajas e inconvenientes’, entre otros.
Un paso adelante
Las conclusiones de este debate marcarán un hito en la evolución del modelo de Rioja que está en marcha, pues el sector vitivinícola riojano está sensibilizado mayoritariamente sobre la necesidad de dar un paso adelante con la incorporación de nuevas figuras de calidad que contribuyan a la diferenciación de los vinos y al reconocimiento de la gran diversidad de Rioja. Buena prueba de la expectación provocada en el sector, tanto por la temática planteada como por el nivel de los ponentes, ha sido el éxito de convocatoria, cubriéndose el aforo máximo previsto para la Jornada.
