Tras haber confirmado que el origen del brote infeccioso de la bacteria E.coli se encuentra en las semillas germinadas –brotes de soja en concreto- procedentes de una explotación en la localidad de Bienenbüttel, en la región de la Baja Sajonia, al oeste del país, las autoridades sanitarias alemanas han levantado finalmente la alarma que habían […]
Tras haber confirmado que el origen del brote infeccioso de la bacteria E.coli se encuentra en las semillas germinadas –brotes de soja en concreto- procedentes de una explotación en la localidad de Bienenbüttel, en la región de la Baja Sajonia, al oeste del país, las autoridades sanitarias alemanas han levantado finalmente la alarma que habían lanzado hace tres semanas sobre el consumo de tomates, pepinos y lechuga:»Recomendamos que se vuelvan a consumir estos alimentos sin limitaciones y disfrutando», declaraba el presidente del Instituto Federal para la Evaluación de Riesgos, Andreas Hensel.
Ayer, el propio ministro de protección de los consumidores de Renania del Norte-Westfalia, confirmaba la presencia de la cepa de la bacteria en un lote de brotes procedente de la explotación de Bienenbüttel, horas después de que el presidente del Instituto Robert-Koch de Berlín, Reinhard Burger, informara de que los brotes de verduras de Bienenbüttel eran, «con gran probabilidad», los causantes de la epidemia.
Las autoridades sanitarias han confirmado, además, que el riesgo de contagio fuera de las fronteras de Alemania es muy limitado, ya que según confirmó la Comisión Europea estas semillas no han sido exportadas a otros países.
Aunque en Alemania -especialmente en la zona norte- el número de afectados por el brote epidémico se va estabilizando poco a poco, no se descarta la posibilidad de neuvas víctimas. Al día de hoy son ya 33 las muertes (32 en Alemania y una en Suecia) y 2.988 las personas enfermas sólo en Alemania, 759 en estado grave al padecer el síndrome urémico hemolítico.
Rusia también levanta el veto
También Rusia anunció ayer el levantamiento del veto a la importación de verduras europeas. «Estamos dispuestos a la reanudación de esos suministros a cambio de garantías de los correspondientes servicios de la UE», declaraba el presidente ruso, Dmitri Medvedev.