La quinoa se originó en el entorno geográfico de Los Andes, en los alrededores del lago Titicaca de Perú y Bolivia hace unos 7.000 años. Las evidencias históricas más fidedignas indican que su domesticación por los pueblos de América pudo haber ocurrido entre los años 3000 y 5000 a.C.
La palabra quinoa o quinua proviene de la lengua quechua y significa “grano madre”. En la época de los Incas este grano era considerado un alimento sagrado y era usado para propósitos medicinales. A la llegada de los españoles, la quinua tenía un desarrollo tecnológico apropiado y una amplia distribución en el territorio Inca y fuera de él. Sin embargo, durante la conquista este grano fue reemplazado por los cereales, a pesar de constituir un alimento básico para la población de la época, situación que sólo se comenzó a revertir hace algunas décadas.
El aumento en el consumo actual de la quinoa se debe a varias causas, pero especialmente al crecimiento en la demanda por parte de los países desarrollados como Estados Unidos, Canadá, Japón, Francia y Países Bajos, entre otros, en los que algunos segmentos de la población buscan alimentos saludables, encontrando en la quinua una excelente alternativa, con altos estándares de calidad y, en especial, producida de forma orgánica.
Y es que, aunque técnicamente sea una semilla, a menudo nos referimos a la quinoa como un cereal, ya que se consume de manera similar a productos como el maíz, el arroz y el trigo. Un alimento de muy alto nutritivo gracias a su alto aporte de energía, proteína vegetal, fibra, grasas no saturadas y minerales que, además, da lugar a originales y sabrosas elaboraciones como esta Ensalada de quinoa con atún y jengibre, una receta del chef japonés Takahiro Tozawa, ofrecida por la FAO – Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, en su Recetario Internacional de la Quinua: Tradición y Vanguardia.
Ensalada de quinoa con atún y jengibre
INGREDIENTES
- 1 taza de quinoa
- 2 puñaditos de algas marinas
- 2 latas (de 80 gr) de atún
- 2 tomates en trocitos
- Jengibre pelado al gusto
- Vinagre de vino al gusto
- Jugo de limón al gusto
- Sal al gusto
ELABORACIÓN
Cocinar la quinoa en dos tazas de agua.
Partir en trozos el alga, las cebolletas y los tomates.
Enjuagar bien la quinoa cocida en un colador y colocar en un recipiente junto con el atún.
Agregar el jengibre pelado, el vinagre, el jugo de limón y la sal.
Mezclar todos los ingredientes.





