La comarca alicantina de la Vega Baja, una zona única por la riqueza de sus canales de riego, el entorno medioambiental mediterráneo y su privilegiada huerta, acaba de iniciar oficialmente su temporada de alcachofas, que a partir de ahora se distribuyen al mercado frescas, sabrosas y saludables… en su mejor momento.
Una temporada que se ha inaugurado con el tradicional acto del primer corte simbólico, que en esta ocasión ha tenido lugar en la localidad de Rojales y de la mano de chef José Luis Cases, ganador del premio a la mejor tapa de la Comunidad Valenciana.
“Tras los daños sufridos la pasada campaña debido a la DANA, esta temporada la iniciamos con ilusión, esperanza, ánimos renovados y con la fuerza que nos caracteriza. La Joya de la Huerta vuelve al mercado para satisfacer la demanda de los consumidores que cada vez aprecian más nuestra alcachofa debido a su calidad, a lo tierna que es y a la experiencia que tenemos en la zona a la hora de cultivarla y comercializarla”, explicaba durante el acto Diego Martínez, presidente de la Asociación Alcachofa de la Vega Baja.
Buenas previsiones para la temporada 2020
Una recolección que este año proviene de una superficie de plantación de unas 1.800 hectáreas, aproximadamente un 15 % menos que la de años anteriores debido, entre otras causas, a la falta de zuecas para plantar —estacas laterales de la mata de alcachofa— perdidas con los temporales pasados, a las consecuencias económicas que éstos tuvieron para muchos de los agricultores, a la rotación de plantaciones que se ha llevado a cabo para oxigenar el terreno, o la propia incertidumbre causada por la actual crisis sanitaria.
Además, las temperaturas más bajas que ya se están registrando en la zona van a favorecer el cultivo y la calidad de la alcachofa: “Si todo se desarrolla dentro de la normalidad, la producción de alcachofas en la Vega Baja podría superar las 22.000 toneladas”, avanzaba Diego Martínez, señalando la dificultad que supone realizar un pronóstico a principios de campaña.
Por su parte, la consellera de Agricultura y Desarrollo Rural, Mireia Mollà, apelaba durante el acto del primer corte a los consumidores para que el trabajo de los agricultores tenga su recompensa, especialmente ahora, tras lo que ha sufrido el sector con la DANA y luego el COVID: “La mejor recompensa es consumir alcachofa de la Vega Baja, que la paguemos en condiciones para que puedan seguir trabajando en condiciones dignas, y que sepamos reconocer el trabajo de los agricultores para atender un servicio tan esencial como el abastecimiento y la alimentación”.
