Acaban las vacaciones veraniegas y el mes de septiembre marca, por tradición, el arranque de la campaña de fabricación de mantecados, polvorones y dulces navideños de Estepa, coincidiendo con la feria de la localidad sevillana, punto de inicio de esta actividad puramente artesanal.
Una campaña que arranca con el deseo y la previsión por parte de las diecinueve empresas amparadas en el Consejo Regulador de superar los máximos conseguidos, en cuanto a producción y empleo, en años anteriores, unas cifras que sitúan a Estepa a la cabeza en la producción de dulces navideños en el territorio nacional: cerca de 22.000 kilos de mantecados y polvorones se esperan que salgan de Estepa en los próximos meses, de manos de una industria que genera unos 4.500 puestos de trabajo (85% mujeres) directos e indirectos — transporte, imprentas, fábricas de cartón y envases, maquinaria industrial o talleres de mantenimiento…— durante los casi tres meses de campaña. Lo que se traduce en unos 70 millones de euros de facturación en el principal motor económico del municipio.
“Desde el propio Consejo Regulador y las empresas pertenecientes a su registro, seguiremos trabajando para que en esta campaña de 2017 aprovechemos el crecimiento social y económico. Estimamos continuar con un crecimiento del 5% en la producción respecto a 2016, donde se produjeron unos 20 millones de kilos de dulces navideños y seguir promocionando las bondades de nuestros productos; siempre en estrecha colaboración con las instituciones locales, provinciales, autonómicas y nacionales”, destaca el presidente del Consejo, Eusebio Olmedo.
Mantecados y polvorones de Estepa
Las Indicaciones Protegidas del Mantecado de Estepa y Polvorón de Estepa ponen en valor la excelencia y tradición de estos productos, adquirida a lo largo de los más de ciento cincuenta años que llevan fabricándose en esta localidad sevillana.
Entre sus apuestas seguirá estando la de aumentar la calidad en un producto final que ya cuenta con certificaciones y marchamos de calidad como IFS, BRC o las auditorias del instituto Halal que certifican la producción de mantecados sin elementos prohibidos por la religión musulmana.
Entre los desafíos de esta nueva campaña seguirá estando la exportación y el comercio exterior, dado que hasta ahora sólo un 10% aproximadamente se destina a otros mercados diferentes al nacional.
