El botijo Mahou, como se le llamaba en Madrid, el formato de quinto o botellín pero con un diseño exclusivo de Mahou, desapareció en los años 80 después de marcar toda una época en el Madrid de los años sesenta y setenta.
Pero todo vuelve. Tras la buena acogida del primer lanzamiento del Botijo Mahou en más de 300 bares madrileños el pasado mes de diciembre, ahora la cervecera lanza una segunda edición para que quienes no hayan tenido la oportunidad de adquirirlo puedan hacerlo esta vez en más de 5.000 bares de la Comunidad de Madrid. Una acción exclusiva y limitada hasta agotar existencias, un millón de unidades.
El Madrid de los 60
Con el botijo como protagonista, Mahou trasportará a las generaciones de ayer y de hoy desde 1962, época en la que se creó el botijo, al Madrid más cosmopolita y auténtico actual. Todo a través de la recreación de la época en sus calles, sus carteles, arte y su botijo de siempre. Un proyecto muy especial vinculado a Factoría Mahou en el que comercios y establecimientos también han colaborado para recrear el Madrid de antes y emprender con todos los madrileños un viaje en el tiempo.
Y es que desde sus orígenes en 1890, Mahou ha sido espectador privilegiado de la vida en Madrid, testigo de lo cotidiano y lo excepcional. La marca forma parte de la infinidad de las historias que forman el tejido emocional de la capital. Creciendo junto a los madrileños durante más de 125 años, compartiendo sus historias y experiencias, Mahou se ha convertido en la cerveza de Madrid por excelencia y por eso, una vez más, quiere compartir con todos los madrileños la historia de aquel Madrid que la vio nacer.





