El Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad, todas ellas inscritas en la privilegiada Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, ha puesto en marcha la iniciativa ‘Los Pilares del Gusto’, con la que quieren vincular a su potente entidad histórica y monumental el inmenso acervo culinario que individual y colectivamente contiene cada ciudad.
Como, por ejemplo, la propuesta de la ciudad jienense de Baeza, que de la mano del cocinero Pedro Salcedo propone estas deliciosas Alcachofas Luisa. Salcedo, chef del Restaurante Hotel Juanito, lleva un apellido histórico en esta localidad, pequeña en tamaño, pero que concentra un inmenso acervo cultural en cada metro cuadrado. Sus elaboraciones revisan y respetan ese legado.
Ingredientes
- 4 alcachofas por persona
- 1/4 de litro aceite de oliva virgen extra
- 200 g de pan rallado
- 2 huevos
- 1 diente de ajo
- 4 hojitas de perejil
- ½ litro de agua
- Sal
Elaboración
Masa para las alcachofas. Batir los huevos con una pizca de sal. Majar en el mortero el diente de ajo y el perejil y añadir al huevo batido junto con el pan rallado hasta conseguir una pasta homogénea y relativamente consistente.
Limpiar las alcachofas de las hojas más duras y verdes, partirlas por la mitad. Untar la cara plana de las alcachofas con la masa y freírlas a fuego lento en el aceite de oliva virgen extra hasta que estén doradas. Incorporarlas a una olla con el agua. Hervir hasta que estén suficientemente tiernas e ir probando de sal. Es recomendable dejarlas reposar tapadas al menos una hora
Presentación. Colocar las alcachofas en un plato. Saltear con la salsa de la cocción. Acompañar de algún brote tierno fresco.
Patrimonio Mundial de la UNESCO
Alcalá de Henares, Ávila, Baeza, Cáceres, Córdoba, Cuenca, Ibiza/Eivissa, Mérida, Salamanca, San Cristóbal de la Laguna, Santiago de Compostela, Segovia, Tarragona, Toledo y Úbeda. Son el Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad, quince privilegiadas localidades unidas artística y culturalmente.
Las ciudades que forman la asociación, todas ellas inscritas en la privilegiada Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, convencidas de la relevancia de sus cocinas locales, han decidido promocionar el inmenso acervo culinario que individual y colectivamente contienen, vinculándolo a su potente entidad histórica y monumental.
Con la iniciativa Los Pilares de Gusto se procede a significar la dimensión gastronómica de estas poblaciones únicas, que es sustancia y referencia inseparable de su propia herencia cultural. La riqueza de un conjunto histórico estriba en su individualidad y diferencia, lo que coincide con las esencias culinarias locales, fieles a la tradición, aunque actualizadas como corresponde a la dinámica de los tiempos.





