Una edición limitada de barriles de la icónica Pilsner Urquell sin filtrar, una cerveza tan fresca como se pueda encontrar en las bodegas originales de la ciudad checa de Pilsen, está llegando a diversas cervecerías de Madrid y Barcelona.
La marca checa pondrá a disposición de sus clientes más fieles una partida de la versión más fresca de su cerveza, elaborada exactamente igual que su versión estándar a excepción del filtrado y pasteurizado final.
Esta cerveza —la primera tipo Pilsner de la historia y reconocida como la mejor cerveza pale lager de 2013 por la web especializada RateBeer— se puede degustar a diario en la fábrica de Pilsner Urquell en la ciudad de Pilsen directamente de las barricas situadas en los túneles subterráneos que conforman la bodega centenaria de la cervecera.
Desde 1842
Ahora, y de manera excepcional, durante unos días en Madrid y Barcelona casi un centenar de establecimientos podrán ofrecer este icono de la República Checa, que en 1842 revolucionó la categoría con la creación de una cerveza dorada, transparente, refrescante y con un cuerpo equilibrado entre dulzor y amargor.
Una cerveza que no ha variado su fórmula, su método de elaboración tradicional e inconfundible por la triple decocción a fuego vivo, ni sus ingredientes de calidad y proximidad: lúpulo de Saaz, cebada de Moravia y agua blanda de sus propios acuíferos.
“La cerveza que podremos disfrutar estos días destaca respecto a la versión estándar por ser algo turbia —debido a la presencia de levaduras que no han sido filtradas previo envasado—, con mayor cuerpo y una excepcional frescura: la mayor que se puede obtener en nuestra cerveza, al conservar todas las propiedades naturales del proceso de elaboración”, comenta Roger Simó, director general de SABMiller Brands Europe España.