En algunos hogares, la cocina de exterior se plantea como un espacio fundamental que, junto a la unión del patio, jardín o terraza, supone un lugar perfecto y funcional para disfrutar de la buena cocina hecha en casa, especialmente en las zonas y meses del año en que la climatología mejor lo permite.

Una tendencia en la concepción de las viviendas que está creciendo en la actualidad, la de construir fuera de la vivienda espacios habitualmente situados en el interior del hogar, o bien integrar ambos espacios en uno, con la posibilidad de abrirse al exterior.

Cómo elegir la mejor cocina exterior

“Gracias a la unificación de esta zona con el entorno natural obtenemos lo mejor de nuestras casas en la zona exterior, jugando con el espacio y los diferentes diseños y estilos , buscando construir un espacio práctico, cómodo y agradable”, explican desde la Asociación de Mobiliario de Cocina (AMC), a la vez que han querido ofrecer una serie de interesantes consejos para acertar con la cocina de exterior que mejor se ajuste a nuestros gustos y necesidades:

Estilo clásico. No es necesario disponer de un gran espacio para tener confort y funcionalidad; con un patio o terraza se pueden unificar los elementos más útiles para crear un comedor y cocina clásica, con toques blancos y uso de mobiliario de madera tratada, para darle un toque de calidez. A su vez, toda cocina de estilo más tradicional debe prestar atención a la iluminación, que ayuda al aura de paz y tranquilidad en este espacio, sobre todo para disfrutar de las tardes y noches de esta época estival. En este tipo de cocinas predomina el empleo de la cerámica, mármol o la madera con molduras, capaces de combinarse con otros materiales como el hormigón o la piedra, siempre teniendo en cuenta que este espacio va a estar expuesto a las inclemencias meteorológicas, por lo que los materiales deben ser resistentes.

Moderno y simple. Las cocinas exteriores de estilo más moderno o minimalista tienen como característica el uso del color blanco y la importancia de la iluminación. Se busca la sencillez con toques de materiales naturales como la madera tratada. Además, se pueden completar con la presencia de plantas y algunos toques de color en los complementos, a través de los manteles, vajilla, cojines… Este estilo debe reflejar simplicidad y elegancia, con formas rectangulares, arquitecturas de hormigón y paredes blancas, aunque es posible darle un toque de color con algunas zonas de azulejos o mosaicos de colores. En cuando a los suelos, es recomendable utilizar pavimentos antideslizantes y que aguanten las temperaturas extremas.

Rústica. Según la AMC, este tipo de cocina es el favorito del público, debido al uso de ladrillo o azulejos, que invitan a recordar la infancia y los buenos momentos en familia. Lo ideal es que sea amplia y funcional, para dar cabida a varios comensales, y usar colores tierra con tonalidades verdes aportadas por las plantas. En este estilo la gran protagonista es la barbacoa —de gas o eléctrica, de carbón o de obra—, una chimenea y una gran mesa de material natural donde hacer reuniones, comidas familiares…

De madera, piedra y hierro. Si lo que se quiere es un diseño innovador, pero cómodo, en el que se priorice también la estética, lo mejor es una combinación de rústico y moderno, de piedra y hierro. Otra opción, cada vez más utilizada para integrar la cocina interior en el exterior con acceso directo al patio o jardín, es añadir el uso de tonos madera, gris y blanco para integrarlo con el material de piedra del exterior. Sin embargo, hay que tener en cuenta unas características específicas en cuanto a impermeabilidad y resistencia y, por supuesto cuidado, por lo que se recomienda cubrir el área de estos muebles en épocas del año donde no se utilicen tanto.

Exóticas o tropicales. Las cocinas exteriores con inspiración tropical o exótica deben tener como protagonista un jardín con gran cantidad de vegetación y plantas acorde con el que construir ese ambiente. El diseño siempre debe ir pensado en función a esta zona como un todo. Si el espacio es completamente exterior, se recomienda contar con alguna parte techada para proteger de la lluvia o del sol a los comensales. Además, se debería reservar también una zona con pérgola, por ejemplo, para colocar la cocina, la nevera o frigorífico. También con mobiliario para almacenar los cubiertos y utensilios, todo ello en una atmósfera rodeada de vegetación para dotarle de ese toque exótico.

Terrazas o espacios pequeños. Si se dispone de una terraza, patio o jardín de espacio reducido, lo ideal será ambientarla como un espacio íntimo y mágico, donde en el comedor exterior se podría incluir una pequeño toldo que tuviese plantas o flores o, por ejemplo integrar la cocinas interior de la casa en el patio con un acceso directo que integre ambas zonas través de puertas correderas o similar. Este tipo de cocinas funcionan muy bien con la estética mediterránea, con colores cálidos, toques como azulejos o ladrillo y mucha iluminación.

 

Resumen
En verano, ¿es posible también una buena cocina exterior?
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En verano, ¿es posible también una buena cocina exterior?
Descripción
En algunos hogares, la cocina de exterior se plantea como un espacio fundamental que, junto a la unión del patio, jardín o terraza, supone un lugar perfecto y funcional para disfrutar de la buena cocina hecha en casa.
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