Tras varios meses de búsqueda por explotaciones agrícolas familiares de Galicia, un experto catador de carne, Imanol Jaca, dio con dos ejemplares únicos de raza rubia gallega -Blanco y Tato, de 1.385 kgs y 1.490 kgs respectivamente- unos bueyes cuya carne y calidad es realmente como las de antaño. Una alimentación totalmente natural y años […]
Tras varios meses de búsqueda por explotaciones agrícolas familiares de Galicia, un experto catador de carne, Imanol Jaca, dio con dos ejemplares únicos de raza rubia gallega -Blanco y Tato, de 1.385 kgs y 1.490 kgs respectivamente- unos bueyes cuya carne y calidad es realmente como las de antaño.
Una alimentación totalmente natural y años de trabajo en el campo han conferido a estos animales una musculatura firme y una carne con unas cualidades que no se dan en bueyes jóvenes.
Ahora, durante las próximas dos semanas, los establecimientos del Grupo Sagardi de Madrid, Barcelona y Valencia celebran las Jornadas Gastronómicas del Buey, ofreciendo txuletones procedentes de estos ejemplares.
Para conseguir su máxima expresión como producto gastronómico, las piezas llamadas ‘txuleteros’, de 27 kilos cada una, permanecen en una cámara frigorífica por espacio de 25 días. Esta carne, marmoleada y entreverada como si la de un buen jamón, está recubierta de grasa natural, con aromas a hierba y trigo fresco.
Los txuletones se sirven acompañados de una buena ensalada de lechuga y cebolla, aliñada con aceite virgen extra, junto a su corespondiente vino tinto. Una propuesta gastronómica muy vinculada a la tierra y al producto, que busca el retorno a los orígenes de la cocina vasca, sencilla y sin sofisticaciones.
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