La miel de la comarca extremeña de Villuercas e Ibores es única. Tanto, que ha dado lugar a una miel con Denominación de Origen Protegida, un producto natural producido por las abejas Apis Mellíferas a partir del néctar de las flores que liban, transforman y combinan con sustancias específicas propias y almacenan, dejando madurar en los panales de la colmena.
Su riqueza en azúcares demuestra el gran valor alimenticio y energético, con la ventaja de que estos azúcares son simples y no necesitan transformación en nuestro organismo, pasando directamente a la sangre. Y es que las mieles, sobre todo las mieles oscuras o mieles de ‘mela’, proporcionan al organismo sustancias minerales de gran interés alimenticio, además de contener también fermentos y diastasas que ayudan eficazmente a la digestión de otros alimentos.
Pero, además de su calidad alimenticia, el hecho de disponer de una figura de calidad otorgada por la Unión Europea, como es la Denominación de Origen Protegida, supone un respaldo oficial a la carta de naturaleza de estas mieles, de un suelo, un clima, un agua y unas plantas que no se conjuntan y equilibran en cualquier otro lugar, y que en la cocina dan lugar a platos como esta Lubina asada con setas y miel DOP Villuercas-Ibores, una receta ofrecida por la DOP Miel Villuercas-Ibores.
Lubina asada con setas y miel
INGREDIENTES
- 1 lubina de 1,5 kg aproximadamente
- 300 gr de setas de temporada
- 20 uvas
- 100 gr de Miel D.O.P. Villuercas-Ibores
- 25 ml de vino blanco
- Tomillo fresco
- Sal en escamas, o sal gorda
ELABORACIÓN
Descamamos la lubina, la abrimos y sacamos dos lomos. Limpiamos bien el pescado de las escamas y espinas que pudiera tener. Cortamos en las raciones pertinentes.
Hacemos una pequeña incisión en forma de cruz en la piel de las piezas.
En una sartén, a fuego vivo, salteamos los lomos, primero por el lado de la piel. Cuando el pescado tenga un color tostado le damos la vuelta para que se haga por el otro lado. Añadimos las escamas de sal.
Mientras, pelamos las uvas y les quitamos las pepitas.
En una sartén ponemos a reducir la miel y cuando empiece a ponerse oscura añadimos la copa de vino blanco. Dejamos reducir de nuevo y añadimos las uvas. Bajamos el fuego y dejamos que estas se pochen y se ablanden.
Una vez asada la lubina la retiramos de la sartén. En esa misma sartén salteamos a fuego vivo las setas. Estas han de estar limpias. Retiramos las setas del fuego una vez que hayan quedado doradas. Añadimos una pizca de sal.
Para terminar, colocamos en el centro del plato las setas, y encima la lubina con la piel plateada y crujiente hacia arriba. Alrededor de la lubina colocamos las uvas y adornamos con un hilo de salsa de miel y con unas ramitas de tomillo fresco.





