La cifra de negocios de las bodegas españolas en 2013 creció hasta alcanzar los 6.465,3 millones de euros, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que supone un importante aumento del 4,4% con respecto a los datos de 2012 y un récord histórico.
Sin embargo, el incremento de los costes —un mayor gasto en personal y consumo de materias prima— condujo a una pérdida en el resultado de explotación del -5,2%, hasta los 238 millones de euros, según indica el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv).
Entre enero y septiembre de 2014, Alemania aumentó notablemente el volumen importado de vino español, aunque con menor gasto al ser el granel el protagonista de este desarrollo —a precios mucho más baratos—, unido a la caída de envasados y, sobre todo, de espumosos. Para el total de vino, Alemania, primer comprador mundial en litros, mantuvo estable el volumen adquirido, aunque gastó algo menos.
Por otra parte, caen las importaciones de vino en Austria, aunque el vino español creció a muy buen ritmo. También caen las compras en Irlanda, en este caso con España perdiendo cuota de mercado, y con Chile como primer proveedor.