Actualmente nos enfrentamos a un deterioro de los ecosistemas y a las consecuencias del cambio climático y, sin embargo, se siguen perdiendo y malgastando alimentos. Según la FAO este año se ha registrado un aumento de la pérdida y el desperdicio de alimentos como resultado de las restricciones impuestas a los desplazamientos y el transporte debido a la pandemia.
No obstante, sin tener en cuenta la crisis sanitaria, cada año se pierde alrededor del 14 % de los alimentos del mundo antes incluso de que lleguen al mercado. La pérdida de alimentos está valorada en 400 000 millones de dólares (355 000 millones de euros) anuales, una cifra a la que habría que añadir el desperdicio de alimentos en supermercados, restaurantes, hogares… En lo que respecta al impacto ambiental, la pérdida y el desperdicio de alimentos generan el 8 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (GEI).
Y es que la pérdida de alimentos se produce desde la explotación agrícola hasta la venta al por menor —excluida esta última—, mientras que el desperdicio de alimentos tiene lugar en los ámbitos de la venta al por menor, los servicios alimentarios y los hogares. Las causas pueden abarcar desde la manipulación deficiente, el transporte o almacenamiento inadecuados, la falta de capacidad de la cadena de frío y las condiciones atmosféricas extremas hasta las normas sobre cuestiones estéticas y una falta de planificación y habilidades culinarias entre los consumidores.
En pocas palabras, reducir la pérdida o el desperdicio de alimentos es una prioridad a la que podemos aportar nuestra pequeña pero gran contribución con gestos como reutilizar las sobras preparando recetas como, por ejemplo, esta Sopa de cebolla de Fuentes con queso, una receta ofrecida por el Gobierno de Aragón a través de su portal Gastronomía Aragonesa.
Sopa de cebolla con tostas de queso crujiente
INGREDIENTES
- Cebollas sobrantes que nos interese ir acabando (unos 400 g)
- 40 g de mantequilla
- 100 ml de vino blanco seco
- 800 ml de caldo de carne
- Sal
- Pimienta negra recién molida
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 8 rebanadas de pan tostado
- 50 g de queso rallado
ELABORACIÓN
Pelamos y cortamos las cebollas en tiras finas y en una cacerola con mantequilla las sofreímos, luego añadimos el vino y el caldo, salpimentamos y dejamos cocer todo durante 30 minutos.
Precalentamos el grill.
Pelamos y machacamos el ajo, lo batimos con el aceite y con esta emulsión untamos las rebanadas de pan tostado. Las espolvoreamos con queso y las ponemos a gratinar hasta que el queso quede dorado y crujiente.
Emplatamos la sopa y la acompañamos con las tostas de queso crujiente.





