La provincia de Salamanca ha puesto en marcha un Plan de Dinamización de la Ruta del Vino de la Sierra de Francia. El proyecto recorrerá dieciséis localidades en las que se desarrollará una actividad común para todas ellas y se completará con otras específicas, con el objetivo de convertir la Ruta en un producto de enoturismo contemporáneo, recuperando las tradiciones y celebraciones perdidas.
La actividad común a todas las localidades de la Ruta consistirá en una combinación de espectáculos y degustación de vino, que se complementará con las específicas de cada municipio, diseñadas para recuperar tradiciones, patrimonio, potenciar intercambios y reforzar la vinculación de los municipios y sus gentes con la Ruta del Vino y su cultura.
La Sierra de Francia
Este Plan de Dinamización de la Ruta del Vino de la Sierra de Francia —impulsado por la Diputación de Salamanca, junto con el Grupo de Acción Local ADRISS y los municipios de la Ruta del Vino, en colaboración con la DOP Sierra de Salamanca— se llevará a cabo a lo largo de este año 2018, ensalzando la riqueza gastronómica, cultural, arquitectónica y natural de las localidades que forman parte del recorrido.
Las dieciséis localidades que componen el recorrido son: Miranda del Castañar, Valero, San Esteban de la sierra, Los Santos, Santibáñez de la Sierra, Cepeda, Cristóbal de la Sierra, Sotoserrano, Langunilla, Garcibuey, San Miguel de Valero, Villanueva del Conde, San Martín del Castañar, Sequeros, Madroñal y El Cerro.
La actividad común a todas ellas, denominada Catar un Territorio, consistirá en una combinación de ceremonial/espectáculo/foro y degustación, no sólo de vino y productos de la zona, sino también de paisajes, personajes e historias. Esta actividad se complementará con las específicas de cada localidad, diseñadas para recuperar tradiciones, patrimonio, potenciar intercambios y reforzar la vinculación de los municipios y sus gentes (habitantes y visitantes) con la Ruta del Vino y su cultura.
Una cultura del vino milenaria
Se trata de un proyecto que pretende poner en valor una cultura del vino milenaria, la de la Sierra de Francia, ubicada al sur de la provincia de Salamanca e integrada en la Reserva de la Biosfera de las Sierras de Béjar-Francia y el Parque Natural de la Sierra de Francia- Batuecas. Una cultura que es consecuencia de su orografía, clima, suelos y variedades de uva singulares, como la rufete, y que está asociada a un espacio privilegiado: suelos de pizarra y granito, clima mediterráneo húmedo, fuertes desniveles y viñedos centenarios.
Durante siglos, los viticultores de la Sierra de Francia han ido ganando terreno a la montaña para cultivar viñedo en terrazas, conformando el espectacular territorio que hoy alberga viñedos y bodegas en las que se elaboran vinos de gran calidad, con reconocido prestigio a nivel nacional e internacional. Los vinos de la Ruta del Vino Sierra de Francia están amparados por la D.O.P. Sierra de Salamanca.
