“Una epopeya homérica, un thriller oceánico, una investigación histórica impactante, un ensayo sobre la condición humana, un relato sobre mundos virginales desaparecidos y una crónica fiel sobre la colonización, aquella otra globalización; todo eso es La forma del mundo. Tato Cabal escribe muy bien. Absorbe, hipnotiza, convence, engancha”.
Así se refiere el periodista Jon Sistiaga al libro La forma del mundo (Bolchiro, 2019), una novela sobre la expedición de Magallanes —precisamente este año se cumple el 500 aniversario de la primera circunnavegación—, en la que su autor, Tato Cabal, profundiza en muchos y muy variados temas culinarios referidos a la época de los descubrimientos.
La flota de las especias
La expedición comandada por Magallanes pretendía abrir una nueva ruta para comerciar con las especias, muy valiosas entonces porque paliaban las insalubres condiciones de conservación de los alimentos y mejoraban el gusto de los platos. Las especias orientales que llegaban a los mercados europeos como condimento estaba integrado mayoritariamente por la pimienta, la canela, la nuez moscada y el clavo de olor, y suponían, por facturación y por cantidad, el grueso de ese mercado. Una bolsa de clavo era una gran fortuna en aquellos tiempos.
La novela habla también de algunas de las costumbres culinarias de la época como, por ejemplo, las técnicas de conservación conocidas entonces —sal, endulzamiento, ahumado y secado al sol—, o de la base de la alimentación española de entonces, como gazpachos —todo tipo de sopas frías— y calderetas —todo tipo de guisos al caldero con fuego—, huevos y carnes, a la brasa, sartén o en espetón, de aves de corral, porcino, vacuno, y caza en el sentido más amplio, no solo de corzos o jabalíes, sino que se llevaban a la cocina caracoles, ranas, culebras…
Además, por supuesto, del pan, que era de importancia capital, y se hacía a diario en cada casa, o la sal, también indispensable y muy bien cotizada, y el azúcar, el ingrediente que realmente se cotizaba al mayor nivel, que se sacaba de la caña desde los tiempos de los griegos, por lo que el edulcorante mayoritario era la miel.
El libro acredita, igualmente, todo el cargamento alimenticio que llevaba la escuadra de las cinco naves de Magallanes, navío por navío, pues se conserva en los documentos de la Casa de Contratación de las Indias: Legumbres, carnes, frutas, frutos secos y semillas, quesos, chacinas, bizcochos, membrillo…, así como los nuevos alimentos con los que la expedición entró en contacto al llegar al nuevo mundo, y las diferentes técnicas de cocinado de aquellas tierras.
Título: La forma del mundo | Autor: Tato Cabal | Editado por: Bolchiro | Fecha de publicación mayo 2109 |Libro electrónico ISBN: 9788416503032 – 10,00€ | Papel ISBN: 9788416503025 – 18,00 €
