La chufa, un alimento ya apreciado por los antiguos egipcios, se ha convertido hoy en día en una especie de superalimento, un referente de salud y energía en todo el mundo con múltiples propiedades beneficiosas para el organismo avaladas por diversos estudios médicos. Y el cacao, base del chocolate, se ha usado tanto para fines nutricionales como médicos desde la época de los aztecas, incas y mayas.
Ahora, una a startup valenciana llamada Tx Lab acaba de lanzar dos cremas untables a base de chufa de Valencia. La empresa, que nació con el objetivo de investigar y reinventar nuevas formas de utilización de uno de los productos estrella y más tradicionales de la huerta valenciana, la chufa, ha desarrollado dos cremas: una de chufa y cacao —una especie nocilla, pero con los beneficios de la chufa— y otra de chufa y carob (algarroba) bajo la marca Tiggy, dos productos que han sido certificados por el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Chufa de Valencia.
Chufa, cacao y algarroba
“Nos dedicamos a desarrollar y distribuir productos con la chufa como ingrediente principal. La certificación Denominación de Origen Chufa de Valencia pone en valor el origen y la calidad de nuestros productos. Las características de la chufa son únicas, y sus aplicaciones están todavía por explorar. Con Tiggy, aportamos una nueva forma de consumir el superfood más trendy del momento” comenta Vasco Acúrsio, cofundador de la empresa.
El proceso de creación de los productos tuvo siempre como idea central la utilización de productos de proximidad y el empleo de envases reciclables para colaborar en la sostenibilidad económica y ambiental del entorno. Y es que, como explica el responsable del proyecto, las cremas de chufa Tiggy se pueden consumir en el desayuno, en las meriendas, en un brunch… untadas en pan, aunque también tienen interesantes aplicaciones culinarias como ingrediente en la elaboración de galletas, como relleno de tartas, o en la preparación de brownies, entre otras muchas. Además, son productos aptos para veganos, sin lactosa ni aceite de palma ni aromas artificiales ni conservantes.
Según aseguran los impulsores de esta iniciativa, “la aceptación del producto en los paneles de cata es excelente, destacando, en el caso de la crema Tiggy Chufa&Cacao un sabor a chufa y cacao con un final a madera y frutos secos, mientras que la crema Tiggy Chufa&Carob el sabor a chufa y algarroba se mezcla con notas de regaliz y café”.
