Más de un millón y medio de escolares españoles —el 40% del total del alumnado— comen a diario en el colegio, por lo que es importante tener en cuenta el valor nutricional que supone para los más pequeños seguir una dieta equilibrada en los menús que ingieren.
Llega la hora de la vuelta a la rutina, un momento en el que los adultos nos mentalizamos para retomar el trabajo y los más pequeños empiezan un nuevo curso. Es a ellos a los que probablemente les pueda suponer un mayor esfuerzo retomar sus actividades diarias ya que, disponen de un periodo vacacional más largo. Por ello, es necesario prestar especial atención a su alimentación y dar prioridad a aquellos nutrientes y vitaminas fundamentales para que su rendimiento académico sea óptimo.
En este sentido, cabe destacar el papel de los comedores escolares en nuestro país ya que, 1.639.376 niños y niñas comen a diario en los comedores de sus colegios, lo que se traduce a un 40% del total del alumnado, por lo que es importante tener en cuenta el valor nutricional que supone para los más pequeños seguir una dieta equilibrada en los menús que ingieren. Además, la obesidad infantil se está convirtiendo en uno de los problemas de salud pública más grave del siglo XXI, y la principal causa, aparte del sedentarismo, parece ser que es el seguimiento de dietas desequilibradas.
Pan integral, el menos conocido
En España, este grupo de población ha notado, más que ningún otro, las modificaciones que ha sufrido la dieta en los últimos años y, desde la iniciativa Pan Cada Día han querido transmitir la importancia de inculcar a los más pequeños buenos hábitos alimentarios, no sólo por la repercusión que va a tener la nutrición en su crecimiento y desarrollo, sino también porque la infancia es la etapa en la que se establecen las costumbres alimentarias que les guiarán a lo largo de su vida. Es por ello que no debemos pasar por alto los beneficios saludables de la ingesta de pan y cereales en las principales comidas del día, especialmente de sus variedades integrales, pese a que en la actualidad haya parte de la población que lo desconoce.
En concreto, uno de los datos extraídos del último estudio sobre hábitos alimentarios en adultos realizado por investigadores de la Universidad Complutense de Madrid revela que un 5,6% de la población estudiada opina que los niños no deben comer pan integral y, un 20,5% no sabe o no contesta ante esta cuestión.
Por otro lado, los últimos datos que aporta la Organización Mundial de la Salud (OMS) en relación con este tema, confirman que más del 44% de los niños de entre 6 y 9 años tiene sobrepeso, es decir, prácticamente uno de cada dos menores españoles en edad escolar pesa más de lo que debería. La dieta media de los escolares tiene problemas similares a los que afectan a toda la población. En general, los niños, consumen un exceso de grasa y proteínas y, sin embargo, una cantidad de hidratos de carbono inferior a la aconsejada. También, presentan con frecuencia, aportes insuficientes de fibra y de algunas vitaminas y minerales.
El pan es rico en hidratos de carbono siendo su principal componente el almidón, además aporta una cierta cantidad de proteínas de origen vegetal y apenas contiene grasa, además, especialmente el pan integral, proporciona una cantidad importante de fibra y de ciertos minerales y vitaminas, por lo que es un alimento idóneo para equilibrar la dieta actual de los niños y adolescentes españoles.
Fuentes: Ministerio de Educación, Cultura y Deporte – Organización Mundial de la Salud – Estudio científico de la Universidad Complutense de Madrid Influencia del consumo de pan en la calidad de la dieta y hábitos alimentarios de adultos españoles – Libro Nutrición y alimentación en el ámbito escolar, de Jesús Román – Libro Nutriguía. Manual de nutrición clínica, de Rosa M. Ortega y Ana M. Requejo
