El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Alicante ha calificado la añada 2020 de estos vinos como Excelente, tras la valoración de los vinos elaborados procedentes de esta vendimia. Una calificación máxima que no se daba en esta DOP desde el año 2016.
En opinión de los Servicios Técnicos, esta calidad de los vinos obtenidos tiene mucho que ver con la climatología del año pasado, que resultó muy buena para la evolución y maduración de la uva en las comarcas vitícolas, sin excepción en cuanto a varietales. Blancos de moscatel, en primer lugar, ofrecieron una maduración temprana y una evolución en vinos de gran perfil aromático y buena acidez. En cuanto a tintos de la variedad giró —o garnacha tintorera— en la zona geográfica de Marina Alta, también ha dado muy buenas calidades.
En el resto de las uvas tintas, las lluvias de la primavera, junto con un verano seco y bastante estable, ayudaron a una maduración que se saldó incluso con un ligero aumento de la media de grado Baumé hasta alcanzar los 13,59 º. El conjunto de uvas presentó una gran salubridad y sanidad, y la maduración del monastrell alargó su recolección hasta mediados de noviembre, pudiéndose recoger uvas sobremaduradas para Fondillón. Los vinos que están elaborándose con estas uvas —en opinión de los enólogos— están teniendo un completo perfil con buen ph, color y acidez.
La cosecha 2020 fue de 31.172.516 kilos de uva recogidos en toda la demarcación correspondiente a la Denominación de Origen Protegida Alicante. La última calificación de Excelente en esta figura de calidad fue en el año 2016.
Vinos de Alicante
La combinación de suelos muy especiales, climas templados y humedades relativas configuran al paisaje alicantino como muy propicio para el desarrollo del viñedo. De hecho, las circunstancias históricas atestiguan el buen desarrollo de muchas hectáreas y la gran riqueza de variedades en todas las comarcas, aunque con notable relevancia para la huerta de la ciudad de Alicante.
