El Comité de Gestión de Productos Ganaderos de la Unión Europea, que se reunió ayer miércoles en Bruselas ha adoptado un ‘paquete legislativo’ de medidas extraordinarias de urgencia para minimizar el impacto del veto ruso en el sector lácteo.
Las medidas, que fueron ya avanzadas el pasado 28 de agosto contemplan el almacenamiento privado para todos los productos lácteos y la prórroga del período de compras de productos por parte de la intervención pública hasta finales de año.
En el caso de la ayuda al almacenamiento privado, además de los productos habituales que recoge el reglamento de la Organización Común de los Mercados Agrarios —mantequilla, leche desnatada en polvo y quesos producidos bajo una Denominación de Origen o Indicación Geográfica Protegida— también serán elegibles todos los tipos de quesos objeto del embargo ruso aplicando las medidas excepcionales de actuación en caso de crisis previstas en dicha norma.
Aplicación inmediata
La Comisión establece un límite de retirada de quesos en 155.000 toneladas, cantidad equivalente a las exportaciones previsibles a Rusia por la UE en un periodo de siete meses. Sin embargo, la mantequilla y la leche desnatada en polvo serán retiradas del mercado en las cantidades que sean necesarias para aliviar la situación de desequilibrio, sin que de momento se imponga un límite cuantitativo a las medidas de mercado para estos dos productos.
La financiación de estas medidas se desarrollará en base a una reasignación presupuestaria, sin poner en marcha la reserva de crisis, evitando todo posible riesgo de merma sobre otras partidas presupuestarias, en particular la correspondiente a los pagos directos.
Los reglamentos que regularán esas medidas extraordinarias se publicarán previsiblemente el próximo 5 de septiembre, y se aplicarán desde el domingo 7 de septiembre. A partir de ese momento los operadores podrán iniciar la retirada de productos del mercado comunitario.