El pasado mes de noviembre, más de 30 empresas suscribían la Declaración de Adhesión al Grupo Español para el Crecimiento Verde. La constitución de la sección española del Green Growth Group —iniciativa surgida en 2013 en el marco de la Unión Europea— reúne a la Administración y al sector empresarial implicado en la lucha contra el cambio climático.
Cada una de las empresas que se sumaron a esta Declaración reconocen la importancia de la estrategia de la Unión Europea sobre el crecimiento verde para avanzar hacia un crecimiento sostenible, bajo en carbono y una economía eficiente desde el punto de vista de la energía y consideran que, ante el reto del crecimiento verde y de la lucha contra el cambio climático “el futuro está en nuestras manos y la colaboración público-privada es y será esencial”, según recoge la Declaración.
Y en esta línea ayer martes se presentaba en Bruselas ante la Comisión Europea —de la mano del secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos y representantes de 20 grandes empresas españolas— el Grupo Español para el Crecimiento Verde, como un foro de trabajo estable para avanzar hacia una economía baja en carbono que tiene como objetivos aumentar la participación de las empresas, compartir información, identificar las oportunidades y apoyar la presencia española en foros internacionales en este ámbito.
Sector privado, Administración pública
En la presentación ayer en Bruselas, Federico Ramos destacaba que “la constitución del Grupo español para el Crecimiento Verde marca el inicio de una colaboración fructífera entre el sector privado y la Administración pública en España” para avanzar hacia el objetivo de una economía baja en carbono recordando la importancia de esta Declaración ya suscrita con más de 30 empresas —y a la que se pueden seguir sumando más interesados— y que compromete a los firmantes a calcular su huella de carbono, establecer unos objetivos de reducción cuantificables y comunicar periódicamente los avances obtenidos con esos objetivos y sus logros.