Para que los más pequeños incorporen las verduras en su dieta diaria es necesario, casi siempre, tener mucha imaginación, preparar unos platos muy coloridos e, incluso, recurrir a los trampantojos culinarios. Sin embargo, las verduras y hortalizas son fundamentales para formar adultos saludables y evitar multitud de enfermedades.
Ya sea en el colegio o en casa, en la mayoría de las ocasiones, resulta complicado que los más pequeños ingieran las cantidades necesarias de verduras. Actualmente, tres de cada diez niños y adolescentes comen verduras solo una vez al día, y el 26% lo hace entre dos y cuatro veces a la semana, datos alejados del consumo de 5 piezas de fruta y verdura diarias recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La Asociación Española de Fabricantes de Vegetales Congelados (ASEVEC), quiere recordar la importancia de que los niños incorporen las verduras a la dieta diaria, con el objetivo principal de formar adultos sanos en el futuro. En este sentido, desde esta Asociación creen que la imaginación ante los platos infantiles no debe tener límites, y abogan por incluir las verduras en todo tipo de formatos: congeladas cortadas, en puré, en formato pastel, sopas, cremas, e incluso postres. Y por supuesto, permitir que los más pequeños participen en su preparación.
Por ello, proponen esta receta saludable y divertida a base de verduras congeladas, una Pizza vegetal con jamón y queso, un plato cómodo, rico y rápido, especial para los más pequeños.
Pizza vegetal con jamón y queso
INGREDIENTES
- Bolsa de Coliflor congelada (1kg)
- Bolsa de Brocoli congelado (1kg)
- Bolsa de maíz congelado (1 puñado)
- Jamón cocido (o bacón) al gusto
- Queso rallado al gusto
- Tomate Frito
- 2 huevos
- Sal
- Un chorrito de aceite
ELABORACIÓN
Triturar el brócoli y la coliflor juntas en crudo y sin descongelar.
Extraer, con ayuda de un chino, toda el agua posible.
Batir un par de huevos, salar y añadir la masa del brócoli y la coliflor. Quedará una masa homogénea.
Hacer una bola con la masa y ponerla sobre un papel de horno. Tapar la masa con otro papel de horno y con ayuda de un rodillo darle forma. ¡Diviértete si la quieres redonda, cuadrada o con otra forma! Tú eliges.
Hornear a 190º durante 15 minutos con calor arriba y abajo.
Llevar a ebullición un puñado de maíz congelado y reservar.
La masa se quedará crujiente. Entonces añadir el jamón, el queso, el maíz y dejar en el horno otros 10 minutos más.





