Independientemente de los efectos generales y de las posibles consecuencias de la actual crisis, los datos disponibles muestran una caída importante de las ventas de vino en el mercado nacional, así como de las exportaciones —especialmente en abril— y un descenso del comercio mundial de vino, más pronunciado en valor y precios medios que en volumen, con desigual evolución por mercados.
Así se resume la actual situación y consecuencias de la crisis sanitaria sobre el sector del vino en un informe elaborado por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), titulado Lo que de verdad sabemos del efecto de la COVID-19 sobre el sector del vino, en el que el propio organismo reconoce que, “aunque hay infinidad de análisis sobre los principales efectos de la actual crisis sobre el sector del vino, tanto en España como en el mundo, y conocemos las grandes líneas, los datos disponibles son relativamente pocos y no siempre tan negativos como podría suponerse”.
En términos generales, el mercado, que venía de un notable aumento del consumo de vino en España notable en 2019 —un 9,7 % interanual a diciembre hasta los 1.100 millones de litros según datos del INFOVI—, se encontró con una disminución muy relevante en los primeros meses de 2020 que, por la coincidencia de fechas puede atribuirse al confinamiento. Particularmente en los meses de marzo y de abril, donde la reducción del consumo estimado de vino en España es del 24 % y del 31 % respectivamente.
Como detalle de este consumo y a partir únicamente de los datos disponibles, puede hacerse un seguimiento del consumo en el canal de alimentación, del que sí se dispone de datos, incluso semanales. Según estos datos, desde la semana 14 del año, es decir, la que va del 30 de marzo al 5 de abril, se ve ya un crecimiento notable del 63 % —posible acumulación previa al confinamiento— que se mantiene a lo largo de las semanas siguientes, hasta el 73 % en la semana del 6 de abril y doble dígito hasta el último dato de la semana del 18 de mayo, donde todavía se mantiene un crecimiento del 21 %, muy grande, pero ya con tasas de variación algo inferiores a las de las semanas anteriores.
La crisis sanitaria y el sector del vino. Datos de síntesis
Como resumen de la situación, en su informe el OeMv indica que, “más allá de los datos que nos permiten medir fehacientemente el impacto de la actual crisis sobre los principales parámetros del vino español y mundial, los efectos generales de la crisis han sido ampliamente tratados e incluyen”:
- Cierre de Horeca generalizado, con escasa venta en delivery y lenta recuperación (posible cierre de establecimientos por falta de incentivos para la reapertura)
- Incremento de ventas en alimentación que no compensan la caída en Horeca ni en volumen ni, mucho menos, en valor.
- Incremento notable de ventas online sobre bases muy pequeñas, pero con nuevos clientes que hacen augurar un futuro mejor.
- Caída del turismo, con particular efecto sobre Horeca, durante la crisis y después (vuelos, turismo extranjero, viajes de negocios…)
- Problemas —escasos— sobre la vendimia y prácticamente ninguno sobre la poda, con alguna mención a la escasez de mano de obra.
- Ayudas nacionales oficiales al empleo, sueldo y algunas financieras.
- Ayudas de la Unión Europea concentradas en evitar excedentes: destilaciones, almacenamiento y vendimia en verde.
