El mercado de alimentos congelados superó en 2022 el nivel prepandemia. Tras haber iniciado su recuperación en 2021, el pasado año el valor de este mercado creció cerca de un 3 % sobrepasando ya el máximo histórico de 2019. Destaca especialmente el crecimiento de los segmentos de platos preparados y patata prefrita congelados.
Son algunas conclusiones del estudio Sectores Alimentos Congelados publicado recientemente por el Observatorio Sectorial DBK de INFORMA (filial de Cesce), que recoge que los datos provisionales para el cierre de 2022 apuntan al mantenimiento de la favorable evolución de la demanda de alimentos congelados, cuyas ventas en España se situaron ya cerca de los 5000 millones de euros, un 2,8 % más.
Aunque con una ralentización en la última parte del año —debida al deterioro del gasto de las familias—, destaca el buen comportamiento del canal de hostelería y restauración, que compensó la debilidad del consumo en hogares.
Los congelados por segmentos
Los segmentos de platos preparados y patata prefrita congelados registraron la evolución más positiva en 2022, con tasas de variación cercanas al 6 %. El de platos preparados se cifró en unos 1200 millones de euros, mientras que el de patata prefrita se situó en los 180 millones. Por su parte, los vegetales y carnes congeladas experimentaron aumentos en el entorno del 3 %, lo que permitió alcanzar cifras de aproximadamente 575 y 185 millones de euros, respectivamente. Por su parte, las ventas de pescado congelado siguieron generando la mayor parte del negocio, con una cifra próxima a los 2.850 millones de euros, tras crecer un 1%.
En cuanto a la estructura de este mercado, el sector se encuentra formado por unas 325 empresas —cifra que en los últimos años ha registrado una tendencia de ligero descenso— y el volumen de empleo agregado generado por estas empresas se cifra en alrededor de los 16 500 trabajadores. La estructura de la oferta se caracteriza por el predominio de empresas de pequeño tamaño, junto a las que opera un grupo más reducido de compañías grandes y medianas. En este sentido, se aprecia una tendencia de notable crecimiento de la concentración de la oferta, de forma que en 2021 los diez primeros grupos alcanzaron una cuota de mercado conjunta del 36 %, unos cinco puntos superior a la contabilizada dos años antes.
Y, finalmente, en cuanto a previsiones para este año, el informe contempla que el deterioro de la coyuntura económica, el mantenimiento de las altas presiones inflacionistas y la debilidad del consumo de los hogares se traducirán previsiblemente en un estancamiento del valor del mercado en 2023.
