Llega el verano, y más de siete mil carnicerías en todo el país tendrán ofertas a disposición del público para incentivar el consumo de los diferentes cortes de cordero, todos ellos perfectos para hacer a la brasa, una forma de cocinar sana, respetuosa, y que en estos momentos se encuentra en su mejor precio, ya que a partir de septiembre tiende a elevarse.
“La temporada de verano es uno de los mejores momentos para consumir carne de cordero, ya que el pastoreo de estos animales se realiza durante la primavera, cuando los pastos, bosques y dehesas se encuentran más verdes y con mejores condiciones alimenticias que se complementan con el consumo de cereales. Además, durante el verano el precio es mucho más asequible por la gran producción que hay durante la primavera. Esto, sumado a que en esta época casi no entra producto importado, nos aseguramos que comiendo carne de lechal y cordero nacional estamos ayudando a nuestros ganaderos y contribuimos a la economía rural y al mantenimiento de nuestros pueblos”, explica Tomás Rodríguez, director de Interovic, la Interprofesional del sector.
Cómo preparar la mejor barbacoa de cordero
Una carne que, además, es perfecta para hacer a la brasa, una forma de cocinar sana, muy sabrosa y, sobre todo, muy adecuada a la época veraniega. Por ello, desde Interovic han querido ofrecer una serie de consejos para hacer una barbacoa de cordero perfecta.
Parrilla reluciente. Antes de empezar, asegúrate de que la parrilla esté limpia. Enciende la barbacoa, y tras cinco minutos frota con un papel para eliminar los malos olores y la grasa del último uso. Esos restos anteriores pueden arruinar hasta el mejor de los corderos.
Planificar y calcular. Planifica bien la barbacoa para que no sobre ni falte carne. Si el cordero lleva hueso, serán necesarios unos 500 gramos por adulto y unos 250 gramos por niño.
¿Leña o carbón vegetal? Lo más fácil y rápido es utilizar carbón vegetal, pero si disponemos de leña, lo mejor es hacerlo con madera dura y seca tipo encina.
Encendido sin olores. Si es posible, utiliza para encender la barbacoa piñas o ramas secas. Las pastillas de encendido dejan cierto sabor a químico.
Controlar el tiempo. El tiempo es clave a la hora de hacer una barbacoa, tanto para controlar las brasas como para cocinar la carne. Las brasas deben prepararse una hora antes de empezar a comer, algo más si usamos leña.
Las brasas perfectas. La llama tiene que desaparecer casi por completo y el calor debe repartirse de forma uniforme por toda la superficie. El momento justo para colocar la carne es cuando el carbón o la leña presentan ese tono rojizo característico.
Exceso de llamas. Si en algún momento se avivan las llamas, el mejor truco para acabar con ellas es echar sal por encima.
Temperatura adecuada. La carne debe estar atemperada antes de colocarla en la parrilla. En ningún caso se debe pasar directamente de la nevera al fuego, sino que hay que sacarla al menos una hora antes, para que no se pegue.
El truco del 5 + 5. Si el fuego es el adecuado, basta con hacer las chuletas de cordero cinco minutos por cada lado para que queden crujientes, a una altura de unos cinco centímetros de las brasas.
Y, por último, no marear al cordero. Para que el cordero quede jugoso, es importante no marearlo. No se debe dar la vuelta a las piezas hasta que no estén cocinadas por completo por un lado.
