Una tarta de forma rectangular que se compone de varias láminas de fino y crujiente de hojaldre intercaladas con capas de crema pastelera y nata, un exquisito milhojas al que, como toque final, se decora espolvoreándolo con azúcar glass.
Es la costrada soriana, un pastel muy castellano y, especialmente, muy representativo de la gastronomía tradicional. Por ello, y para reivindicar su importancia dentro de la gastronomía popular de la provincia de Soria, la Asociación Soriana de Confiterías, Pastelerías, Bollería y Repostería (ASEC) impulsa la celebración de la Fiesta de la Costrada este próximo fin de semana, desde el viernes 10 de marzo y hasta el domingo 12.
Una iniciativa que tiene como objetivo el dar a conocer este pastel fuera de los límites de Soria pero también quiere situarlo en el lugar que le corresponde dentro de la gastronomía soriana, es decir, que los propios sorianos se reencuentren con este postre típico que no falta en ninguna celebración ni fiesta familiar en la ciudad y provincia.
Pero, además de la tradicional costrada de nata y/o crema, se elaborarán también versiones más actualizadas de este dulce, como rellenas de trufa, cabello de ángel, elaboradas con mantequilla de Soria, trufadas, de chocolate o praliné, de nata y fresas, de crema de pistacho o con cobertura de chocolate.
La costrada soriana
La costrada soriana es una tarta de forma rectangular que se compone de varias láminas de fino y crujiente de hojaldre intercaladas con capas de crema pastelera y nata. Como toque final, se decora con azúcar glass. Un postre sencillo en su presentación, elaborado con pocos ingredientes que hacen que sea elegante, delicada y muy sabrosa. Su origen es incierto, pero se localiza, presumiblemente, en la ciudad de Soria, y de cuya historia únicamente se sabe que originalmente solo estaba rellena de crema pastelera, pero, desde hace unos cincuenta años se ha ido introduciendo la nata como acompañamiento.
Se trata de uno de los dulces que representa la gastronomía de Soria junto con las Yemas de Almazán, las pastas paciencias, la mantequilla dulce de Soria con Denominación de Origen, los turrones o los chocolates, entre otros.
