El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada Rioja ha seleccionado los vinos que utilizará en sus actos institucionales a lo largo de los próximos doce meses entre las 168 muestras presentadas por las bodegas al concurso que, con este motivo, se convoca cada año.
La elección se ha realizado mediante cata ciega por parte del Comité de Cata del Consejo de las 168 muestras recibidas, lo que significa un importante reconocimiento a la calidad de los vinos que resultan ganadores del concurso y que representarán a la Denominación de Origen Calificada Rioja durante el próximo año.
Los siete vinos seleccionados son una muestra representativa de los diferentes tipos y categorías que actualmente conforman la gama de vinos de la Denominación de Origen Calificada Rioja y se presentan vestidos con etiquetas del Consejo expresamente diseñadas para cada categoría.
Riojas institucionales 2016
Los riojas institucionales en cada una de las categorías son:
BLANCO JOVEN COSECHA 2015
- Bodega: Vinícola Riojana de Alcanadre, S. Coop. de Alcanadre (La Rioja).
BLANCO FERMENTADO EN BARRICA COSECHA 2015
- Bodega: Bodegas del Medievo, S.L. de Aldeanueva de Ebro (La Rioja).
ROSADO JOVEN COSECHA 2015
- Bodega: Bodegas y Viñedos Ilurce S.A.T. de Alfaro (La Rioja)
TINTO JOVEN COSECHA 2015
- Bodega: Bodegas Olmaza, C.B. de San Vicente de la Sonsierra (La Rioja).
TINTO CRIANZA COSECHA 2013
- Bodega: Bodegas Ramírez, S.L. de San Vicente de la Sonsierra (La Rioja).
TINTO RESERVA COSECHA 2012
- Bodega: Bodegas Tobía, S.L. de Cuzcurrita de Río Tirón (La Rioja).
TINTO GRAN RESERVA COSECHA 2010:
- Bodega: El Coto de Rioja, S.A. de Oyón (Álava).
Los vinos de Rioja están amparados por la Denominación de Origen más antigua de España. Cuando a finales del siglo XIX nace el Rioja moderno y se dota de identidad propia el nombre de un producto vinculado a su origen, surge la preocupación de los viticultores y elaboradores riojanos por buscar las máximas garantías de calidad y genuinidad para los vinos producidos en la región y por proteger su identidad de los “usurpadores y falsificadores”.
Esta inquietud culmina con el reconocimiento oficial el 6 de junio de 1925 de la Denominación de Origen Rioja, autorizándose la introducción en las etiquetas de vino de la palabra ‘RIOJA’ con el carácter de marca colectiva y creando una precinta especial. La base legal de esta medida tenía su precedente en la Ley de 1902 sobre la propiedad industrial, que en su título IX hablaba de las “indicaciones de procedencia”.
Por Real Decreto de 22 de octubre de 1926 se creó el primer organismo de control de la Denominación de Origen Rioja, un Consejo Regulador al que se encomendaba la misión de delimitar la zona de producción del Rioja, controlar la expedición de las “precintas de garantía” y recomendar las medidas legales a adoptar contra los usurpadores y falsificadores de la marca Rioja. Su reglamento fue aprobado en febrero de 1928.
