Acaba de reabrir sus puertas la farmacia más emblemática del madrileño barrio de Malasaña: la antigua botica ‘Juanse Especialidades’, un local que data de 1892 y está catalogado como patrimonio histórico nacional por su fachada de azulejos originales de final de siglo XIX, ahora reconvertido en Juanse Kafe, un café y tienda gourmet degustación.

Las vitrinas de la farmacia, que luce nuevo aspecto tras una reforma integral, ya no acogen ni medicamentos ni frascos de laboratorio. Ahora exponen productos delicatessen de primeras marcas traídos del País Vasco y Navarra: conservas guindillas piperrak, sales aromatizadas, caramelos tradicionales y repostería selecta con elaboraciones como xaxus, tejas, cigarrillos de chocolate, pastas de té, pantxineta y turrones de autor.

Y sobre el mostrador de nogal tallado, original de la antigua botica, también una magnífica variedad de repostería artesanal, en este caso, procedente de proveedores locales, como bizcochos, tartas, muffins, panes… La selección de dulces irá variando cada semana, pero nunca faltarán la torrija caramelizada y el coulant, señas de identidad de la casa.

Todo ello se combina con cafés o con una selección de zumos y batidos naturales, yogures artesanos e infusiones que preparan en el mismo Kafe, además de una amplia carta de tostas, raciones, ensaladas y platos de temporada.

El nuevo espacio ha pasado por una recuperación integral del antiguo local, centenario, combinando las piezas originales de la antigua botica, como el mostrador de madera o la báscula de peso, con distintas obras de arte moderno, como varias litografías de Zumeta o Dora Salazar, dos artistas vascos.