La localidad valenciana de Ayora celebra hasta el próximo lunes 12 de octubre una nueva edición de El Primer Corte de la Miel, un evento apícola, gastronómico, turístico y cultural que tiene como hilo conductor la miel, producto por excelencia de la zona muy valorado por su especial calidad.
“En Ayora se elabora una miel de calidad gracias a un proceso artesanal que respeta las cualidades de la miel. La celebración de este certamen es fundamental para promocionar este producto”, asegura la diputada de Turismo, Pilar Moncho, añadiendo que Se trata de un evento que crece año tras año, con una afluencia de alrededor de 35.000 personas durante los cuatro días de la feria.
La feria El Primer Corte de la Miel, abierta al público de 11:00 a 23:00, está estructurada en diferentes áreas: apícola, gastronómica, zona infantil, zona de artesanía, zona comercial y callejones.
En la zona apícola, diferentes expositores de productores locales de miel exponen todas las variedades existentes de miel así como productos derivados de este producto como propóleos, jalea real, dulces, cosmética… Además del que probablemente es el mayor atractivo de la feria, una gran urna de cristal con colmenas en su interior donde los apicultores entran y realizan sus trabajos habituales, desde el inicio, la instalación de una colmena, hasta el momento de extracción de la miel, que posteriormente se da a degustar al público. Se realizan diversas demostraciones en vivo del Corte de la Miel todos los días.
La apicultura en España
En el acto de inauguración de la feria ayer viernes, el secretario general de Agricultura y Alimentación, Carlos Cabanas resaltaba la importancia de la apicultura en España y la necesidad de que se reconozca la trascendencia económica, social y medioambiental de este sector.
Cabanas destacó la importancia productiva de España, que ha conseguido una situación de liderazgo en el marco de la Unión Europea, con más de 30.600 toneladas de miel y un sector que presenta el más alto nivel de profesionalización del ámbito europeo, capaz de imponerse a las dificultades, que crece y viene experimentando un incremento constante en el censo desde hace ocho años, hasta alcanzar los 2,4 millones de colmenas que se encuentran repartidas por toda la geografía nacional y de las que más de 367.000 se sitúan en la Comunidad Valenciana, generando anualmente un valor cercano a los 62 millones de euros.
También destacó el potencial que para esa producción suponen los cítricos que, con más de 200.000 hectáreas dedicadas a su cultivo, ofrecen la mayor concentración de plantas melíferas de toda la península ibérica, y la de mayor rentabilidad para el sector apícola, gracias a sus floraciones de azahar.