Aunque hoy en día es relativamente fácil encontrar todo tipo de frutas y verduras en cualquier época del año, sin embargo lo mejor es consumir los alimentos de temporada, cuando sus sabores, texturas y precios están en su mejor momento.
Y los productos de temporada, incluidos como protagonistas en nuestra dieta diaria, son la mejor forma de garantizar que nuestro organismo recibe regularmente los componentes imprescindibles.
Y este momento del año, el otoño, nos brinda una gran variedad de alimentos, cada uno con propiedades y beneficios diferentes. Por ello, la plataforma online Yocomobien.es ha querido destacar los beneficios de las frutas y verduras propios de estos meses, los alimentos de otoño a los que se puede sacar el máximo partido.
La calabaza es una hortaliza característica del otoño, que destaca por su bajo contenido calórico y porque cuenta con una alta presencia de agua y una buena cantidad de fibra. Es recomendable contra el estreñimiento y la retención de líquidos. Además cuenta con vitaminas A, E y C y un gran aporte de potasio. Son estupendas para consumir asadas al horno, en crema, bizcochos, salteadas con cereales o legumbres e incluso rellenas de diversos ingredientes.
Las alcachofas, que llegan con los primeros fríos, son ricas en agua y en hidratos de carbono. Un alimento que regula la actividad de la secreción biliar y facilita la digestión. Además combate las sustancias tóxicas y es eficaz en casos de hígado graso, a la vez que reduce el colesterol. Se pueden tomar al vapor, rellenas, salteadas, en guisos y arroces, fritas, al horno o en tortilla, entre otras.
Las setas destacan por su riqueza en proteínas y en fósforo, hierro y potasio. Tienen alrededor de un 90% de agua, favorecen el sistema inmunológico y sus componentes, y ayudan al buen mantenimiento de dientes, huesos y mucosas del cuerpo. Perfectas para comerlas salteadas, en pastel, revuelto con huevo, tortilla, arroces y guisos, pizzas, crema…
La granada contiene un bajo aporte calórico debido a su escaso contenido de hidratos de carbono. Al ser rica en antioxidantes ayuda a frenar el envejecimiento, a mantener la piel sana y a prevenir enfermedades del corazón. Se pueden consumir frescas y enteras, en zumos o en ensaladas.
Las espinacas tienen un ciclo de producción bastante corto, ya que su cosecha se lleva a cabo transcurridos unos 40 días, y su cultivo es perfecto en el otoño. Son ricas en fibra, en agua, tienen muy pocas calorías y contienen vitamina C y betacaroteno, lo que contribuye a protegernos contra el cáncer. Se pueden consumir tanto crudas, en ensaladas, como cocinadas formando parte de un guiso.
Además, otras frutas como los kiwis o las manzanas y algunos frutos secos como las avellanas, las almendras y las nueces también son alimentos típicos de esta temporada del año y muy saludables.
