El brócoli cocinado al vapor conserva sus propiedades mejor que cualquier otro proceso de cocinado, ya que ayuda a mantener la vitamina C y sus glucosinolatos, elementos que ayudan a prevenir el cáncer. El salteado en aceite de oliva virgen extra, soja, cacahuete o cártamo, también es muy recomendable.
Son algunas de las conclusiones de una investigación realizada por el grupo Laboratorio de Fitoquímica del Departamento de Ciencia y Tecnología de los Alimentos de CEBAS-CSIC, que colabora de forma activa con la Asociación sin ánimo de lucro +Brócoli.
Los resultados se desprenden de este estudio elaborado tras comparar los diferentes tipos de cocinado con los que se suelen preparar las hortalizas a nivel internacional como son el hervido clásico, la cocción al vapor, el salteado con aceite, al estilo wok asiático o stir frying, además de con el uso de horno microondas y con diferentes aceites de cocina (oliva, girasol, soja, cacahuete y cártamo).
De 3 a 5 minutos
Los investigadores de CEBAS-CSIC confirman que el cocinado del brócoli al vapor, durante tres a cinco minutos, consigue mantener un alto porcentaje de sus nutrientes y fitoquímicos, que casi alcanza el 100%, sobre todo, vitamina C y glucosinolatos, actores imprescindibles en la ayuda para la prevención del cáncer de mama, de pulmón y de colon.
De este estudio también se extrae que los tiempos de cocinado largos, como los del hervido tradicional, y el uso de agua en el horno microondas dificultan la retención de los biactivos de las crucíferas tan necesarios para la salud.
Con virgen extra
«Si bien el aceite utilizado puede estar a más de 120 grados cuando está caliente, en el interior de los floretes de la crucífera no se alcanzan temperaturas que sean dañinas», explica Diego Moreno, investigador de CEBAS-CSIC, refiriéndose al salteado como otro método de cocinado excelente para la conservación de las propiedades del brócoli.
Los aceites más adecuados en este caso serían los de soja, cacahuete, cártamo y oliva virgen extra, pero no refinado, ya que consigue que se pierda la mitad de los glucosinolatos. El investigador recomienda para el salteado de una ración de brócoli de 150 gramos una cantidad de aceite de 30-40 mililitros (2 o 3 cucharadas soperas).
«Tanto el salteado como la cocción al vapor ofrecen una textura del brócoli mucho más rica y agradable para el paladar», matiza Diego Moreno.
La Asociación sin ánimo de lucro +Brócoli tiene como objetivo el incremento del consumo de brócoli y de la concienciación con respecto a sus efectos beneficiosos para la salud. Reúne a agricultores, comercializadores, investigadores, nutricionistas, restauradores y a todas aquellas entidades afines y personas interesadas en difundir las bondades de esta crucífera catalogada como ‘súper verdura’.
