Champagnes de añada, rosados de pinot noir, blanc de blancs, blancs de noir, de viñas viejas, clásicos, vanguardistas, biodinámicos, marcas consagradas… en total más de 150 referencias de champagne, procedentes de diferentes países y muchas de ellas elaboradas por pequeños productores.
Ningún Día de Verano sin Champagne es la propuesta de un establecimiento madrileño, Enoteca Barolo, que a lo largo de este verano irá descorchando más de 150 referencias de champagne, muchas de ellas elaboradas por pequeños productores con los que la enoteca comercia en exclusiva para el mercado español.
La colección incluye perfiles para todos los gustos, ocasiones y circunstancias gastronómicas y de ocio, con champañas de añada (los prestigiosos millésimes) y rosados de pinot noir, delicadísimos blanc de blancs (hechos con la uva chardonnay) y deliciosos blancs de noir, clásicos y modernos, de subzonas reputadas y procedentes de los terruños más especiales y escondidos –aunque de calidad indiscutible–, además de biodinámicos y vanguardistas y, por supuesto, marcas consagradas que representan la elegancia eterna del champán y continúan empeñadas en mantener elevados índices cualitativos.
Desde el 1 de junio al 15 de agosto todas estas opciones se ofrecerán a razón de dos marcas de champagne diarias, y a un precio que oscilará entre los 7 y los 10 euros las dos copas. Parejas de cata tan sugerentes como: Tarlant y Bollinger, Pol Roger y Veuve Clicquot, Jacqueson 736 y Delamotte, Doyard y Lamiable, los rosados de Paul Bara y Baron Fuenté, Pehu Simonet y Gonet Medeville, y así hasta más de sesenta parejas. Además de los últimos champagnes recién llegados, como como Monmarthe, Geoffroy Expression o Louis Dousset, entre otros.
El calendario mensual con cada una de las propuestas de cata diaria puede consultarse en esta dirección.
Catas temáticas
Durante el verano también se organizarán diversas actividades y catas dedicadas al champagne, como la que combinará una selección de las mejores burbujas con las más celebradas anchoas del Cantábrico, un curso de iniciación a la cata, o un monográfico sobre vinos franceses, entro otros. Los viernes por la tarde se dedicarán al descorche de botellas exclusivas que también se servirán por copas.
