En Formentera, antiguamente los pescadores secaban el pescado para aprovecharlo y consumirlo durante todo el año. Hoy en día ya se ha convertido en un atractivo gastronómico de la isla e incluso ha obtenido el aval del Arca del gusto, otorgado por la organización internacional Slow Food.
Hay numerosas especies aptas para ser secadas y saladas, pero las más utilizadas son las de peces cartilaginosos que tienen la piel resistente y sin escama como rayas, musolas y cazones. El proceso se realiza cortando en filetes el pescado limpio, pero sin quitarle lo piel. Se deja en remojo en salmuera —mezcla con base de agua y sal— entre 30 a 60 minutos según el tamaño del pescado, se saca de la salmuera y se deja secar al sol (de uno a cuatro días) colgando los filetes en las puntas de ramos de sobinas.
Una vez seco el pescado, se tuesta al fuego, se desmenuza y se conserva en envases de vidrio con aceite de oliva. El peix sec se puede conservar durante meses para posteriormente preparar elaboraciones tan sabrosas como esta Ensalada payesa, una receta ofrecida por Peix Sec de Formentera.
Ingredientes
- Tomate
- Cebolla
- Pimiento verde
- Pimiento rojo asado
- Patata hervida con piel
- Peix sec (pescado seco)
- Aceite
- Sal
- Bescuit (es un tipo de crostes, si no se puede conseguir, se puede excluir)
Elaboración
Pelar la patata y cortarla junto al pimiento verde y la cebolla en tacos pequeños. Ponerlo todo en un bol y mezclarlo antes de agregar el pimiento rojo asado y el peix sec.
Por otro lado, romper en trozos el bescuit e introducirlo en un trapo de cocina para pasarlo por debajo del grifo de agua para que coja un poco de humedad. Si no se dispone de bescuit, se puede prescindir.
Mezclarlo con el resto de ingredientes y salpimentar la ensalada antes de agregar el aceite del propio envase.
Cocina mediterránea
Formentera es un referente en cuanto a turismo ecológico, sostenible y, sobre todo, de calidad. Su territorio, que mantiene viva la belleza y la esencia del Mediterráneo, permite disfrutar de un ambiente de calma, de la naturaleza en estado puro y del paisaje virgen de sus paradisíacas playas de aguas turquesa y arena blanca, que se extienden a lo largo de más de 20 kilómetros.
Destino ideal para los 365 días del año, Formentera ofrece todo tipo de eventos deportivos, culturales, fiestas populares y mercados de artesanía local, además de su excelente gastronomía, con productos autóctonos de alta calidad y muy diferenciadores, entre los que además del peix sec destacan la sal líquida, una sal natural proveniente del mar, sin ningún tipo de aditivo de color o sabor, la miel, ‘es morer’, un producto autóctono que debe su excelente calidad a la flora de secano y a la ausencia de productos químicos, los higos secos, que fueron durante mucho tiempo uno de los productos básicos en la despensa local y hoy en día son muy apreciados por su intenso sabor, el queso fresco, de Formentera generalmente es mixto (de cabra y oveja) y al ser realizado para el autoconsumo, sigue las pautas de la elaboración tradicional, el bescuit, pan que resulta del horneado prolongado, o el licor de hierbas casero, aprovechando las numerosas hierbas aromáticas de la isla.





