La Fundación Osborne, en la localidad gaditana de El Puerto de Santa María, acoge hasta el próximo 11 de enero de 2021 la exposición El Diamante de Badalona, una muestra que, con motivo de la celebración de los 150 años de esta bebida, hace un interesante recorrido por los la historia de una de las marcas más icónicas de España.
Y es que, desde la procedencia de su nombre hasta la aparición de Charles Darwin en su etiqueta, pasando por su original botella, e incluso una falta de ortografía en la misma, son algunas de las curiosidades de Anís del Mono que se recogen en esta exposición que explora cómo se forjó la identidad tan marcada de Anís del Mono y en la que creador, Vicente Bosch, cuenta con gran protagonismo, ya que gracias a su visión y capacidad de creación, la marca —adquirida por Osborne en 1975— es hoy en día todo un referente.
150 años de Anís del Mono
En el recorrido se muestra el romántico origen de la famosa botella diamantada que se ha convertido en todo un clásico totalmente integrado en la cultura popular del país. Vicente Bosch iba paseando por París en busca de un regalo especial para su mujer y fue en la plaza Vendôme donde encontró el perfume perfecto y, en él, la inspiración para su botella que otras muchas marcas han intentado replicar en sus envases. La etiqueta encierra también algunas curiosidades, como el error ortográfico de ‘destillación’ y que todavía hoy se mantiene. Pero quizás lo más significativo sea el rostro del propio mono: sus rasgos humanoides están basados en el mismísimo Charles Darwin, sin duda un guiño al debate de aquella época sobre la teoría de la evolución.
La exposición también recoge cómo la marca ha servido de inspiración para numerosos artistas nacionales e internacionales. En 1897 Anís del Mono convocó el primer concurso de carteles de España y lo ganó Ramón Casas con sus famosas Manolas, inspiración para distintos pintores como Juan Gris o Picasso.
Otro de los aspectos destacados de la muestra es la recreación de la fábrica, una joya modernista situada a pie de playa en la bahía de Badalona que se ha conservado por su valor artístico y patrimonial y que desde su sala de destilación donde se elabora artesanalmente el anís, expande el olor tan característico del anís por toda Badalona. Además, la exposición también permite descubrir otras bebidas que en la actualidad ya no se comercializan, pero que despertarán la curiosidad del visitante, como son la absenta y otros licores de la época.
