Tras una serie de conversaciones mantenidas con representantes de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (ACERGA) el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha acordado la cesión de 500 toneladas de jurel a cambio de 500 toneladas de caballa asignada a la flota gestionada por ACERGA.
Con este cambio de cuotas de jurel por caballa se podrá reabrir las pesquerías de jurel tanto en la zona norte (zona 8c) como en la zona sur de Galicia (zona 9a). Según informa el Ministerio, se ha decidido autorizar este cambio de cuotas “para permitir la vuelta a la actividad de una flota que permanecía parada, por agotamiento de su cuota de jurel y para maximizar, de esta manera, el uso de la cuota española de jurel”.
Además, continúa el comunicado del MAGRAMA, “se consigue un beneficio general, ya que la contrapartida de cuota, las 500 toneladas de caballa no capturadas por esta flota se utilizará para reducir la sanción de caballa a la que está sometida la flota española por sobrepescas en 2009 y 2010, repercutiendo este beneficio en toda la flota del Cantábrico y Noroeste, que dispondrá de más posibilidades de pesca para el año próximo”.
Asimismo, y tal y como se había confirmado en la reunión del pasado 23 de octubre con representantes de ACERGA, una vez finalizada la campaña de pesca de este año, y después de la aplicación del Plan de gestión para los barcos de los censos del Caladero Cantábrico Noroeste, durante los años 2014 y 2015, se procederá a convocar a todos los actores involucrados (diferentes sectores y Comunidades Autónomas), para valorar la eficacia de las medidas contempladas en el mencionado Plan.
El conflicto
Tras el consumo total de la cuota global asignada para el año 2015, la Secretaría General de Pesca decretaba el pasado 16 de octubre el cierre de la pesquería de jurel del stock JAX/09 (zona IX del Consejo Internacional para la Exploración del Mar, CIEM) para los buques de cerco que optaron por una gestión conjunta de su cuota individual, dentro de la Asociación ACERGA.
El portavoz de ACERGA, Andrés García, criticaba entonces en declaraciones al diario La opinión A Coruña que la Secretaría General de pesca realizase este aumento sin consultar con el sector: “Nadie pidió que se aumentase el 10% y el Ministerio decidió hacerlo de oficio sin preguntarnos. No entendemos nada”, recriminaba el también patrón mayor de Sada denunciando la ‘crítica’ situación de su flota, que apenas disponía de cuota de sus principales especies objetivo y que con este nuevo cierre solo podrían dedicarse a la captura de sardina —con un tope de 6.000 kilos semanales— y xarda (o caballa).
Por su parte, el Ministerio puntualizaba que “en el contexto de las pesquerías de la flota de cerco gallega, en gestión conjunta dentro de la Asociación ACERGA, hasta el momento, se constatan resultados económicos favorables, ya que el valor de las capturas desembarcadas hasta agosto de 2015, supera el valor de las realizadas en las diferentes pesquerías durante todo el año 2014”. Estos beneficios, añadía el Ministerio, “se han incrementado notablemente gracias al aumento del precio medio por kilogramo para las especies que captura esta flota de cerco, ya que su volumen de capturas en 2015 se mantiene de momento ligeramente por debajo del conseguido el pasado año”.
